¿Por qué los usuarios llegan… pero no avanzan?
Detecta en 5 días las fricciones UX que están afectando tu conversión y crecimiento.
Hace poco, durante una conversación con el director de producto de una plataforma tecnológica, surgió una inquietud que me pareció reveladora.
“Tenemos tráfico, tenemos funcionalidades… pero no logramos que las personas avancen”, me dijo, con una mezcla de sorpresa y cansancio.
Habían optimizado el embudo. Reorganizado flujos. Probado campañas. Incluso habían invertido en inteligencia artificial para predecir comportamientos. Y sin embargo, el uso real no despegaba. Los usuarios llegaban… pero no se quedaban. No completaban. No volvían.
Este tipo de escenarios son más comunes de lo que se reconoce públicamente. En muchos equipos, cuando algo no funciona como se espera, lo primero que se cuestiona es el marketing, el presupuesto, o incluso el canal de adquisición. Pero rara vez se apunta al diseño de la experiencia como el núcleo del problema.
Y sin embargo, es ahí donde con más frecuencia se pierden las oportunidades.
Lo he dicho en más de una ocasión: una experiencia mal diseñada puede matar una idea excelente, del mismo modo en que una mala señalética puede hacer que nadie entre a un museo, por más fascinante que sea la exposición.
La competencia ya no es solo funcional: es experiencial
En casi todos los sectores —banca, retail, salud, educación, tecnología— la competencia ya no se libra solo en precios, productos o funcionalidades. Hoy se compite en experiencias. Y esa diferencia, aunque a veces imperceptible, es decisiva.
Piénsalo así: dos plataformas pueden ofrecer exactamente el mismo servicio, al mismo costo. Pero una facilita el proceso, anticipa las dudas, resuelve con elegancia. La otra requiere esfuerzo. Y lo sabemos: los usuarios no tienen paciencia para la fricción. No porque no les importe el producto, sino porque hay otra opción a un clic de distancia.
Según el informe State of the Connected Customer de Salesforce,
el 57% de los clientes ha dejado de comprar en una empresa porque otro competidor ofrecía una mejor experiencia.
Salesforce Research, 5ª edición (2021)
No se trata de errores catastróficos, sino de pequeñas desconexiones que erosionan la confianza: formularios confusos, tiempos de espera innecesarios, textos que no orientan, botones mal ubicados. Lo pequeño se vuelve costoso. Y lo que parece invisible, termina alejando usuarios.
El Radar de Conversión UX: claridad donde otros ven ruido
Ante este escenario, muchas empresas buscan soluciones en dashboards, analítica avanzada o herramientas de IA que prometen predecir el comportamiento del usuario. Pero pocas se detienen a mirar con rigor la experiencia en sí. Y ahí es donde el Radar de Conversión UX se vuelve clave.
No es una auditoría genérica. Tampoco es un informe de cientos de páginas que nadie lee.
Es una intervención concreta, profesional y accionable.
Un escaneo enfocado en detectar las 5 fricciones más críticas que están afectando hoy la conversión, adopción o retención en tu plataforma digital.
Funciona así:
Seleccionamos juntos un flujo clave de tu producto (registro, cotización, compra, activación, etc.).
Analizo ese recorrido desde una perspectiva UX estratégica, considerando intención del usuario, arquitectura, diseño de interacción y claridad de contenido.
Entrego un informe ejecutivo, con hallazgos priorizados, recomendaciones prácticas y ejemplos comparables.
Todo esto, en menos de una semana.
¿Qué se obtiene realmente?
Más que un diagnóstico, el Radar UX entrega una conversación estratégica con base real.
No se trata solo de detectar fallas, sino de entender cómo mejorar desde la experiencia.
Concretamente, obtienes:
Un análisis independiente y especializado, sin sesgos internos.
Argumentos para tomar decisiones de producto con mayor claridad.
Un documento que puede compartirse con equipos técnicos, de negocio y diseño.
Prioridades claras, sin perder semanas en reuniones.
Y sobre todo: una herramienta para construir consenso en torno a la experiencia.
Y lo más importante: la oportunidad de corregir a tiempo, antes de que la competencia lo haga primero.
¿Por qué pedir un Radar UX ahora?
Muchas decisiones importantes se están tomando a ciegas. A partir de datos que no explican lo que realmente está ocurriendo. El Radar UX no sustituye a tu equipo, ni reemplaza otras herramientas. Lo que hace es desbloquear perspectiva. Te da argumentos, evidencias y un camino claro para avanzar con intención, no con ensayo y error.
Porque en este escenario hipercompetitivo, el margen entre avanzar o estancarse no está solo en la tecnología, sino en cómo esa tecnología se vive.
No basta con tener un producto funcional.
Hay que ofrecer una experiencia pensada al detalle.
Y eso —aunque parezca obvio— no es lo que muchas compañías están haciendo en LatAm.
Diseñar mejor no es solo una cuestión de estética. Es una cuestión de estrategia.
Cada fricción que no detectas es una oportunidad que se pierde.
Cada flujo mal resuelto es un cliente que no vuelve.
Y cada día que postergas la conversación sobre experiencia, es un día que otro competidor sí la está teniendo.
Por eso, si tienes un producto digital que funciona pero no convierte como esperas, conversemos.
Estoy ofreciendo 3 espacios (gratis) por mes para aplicar el Radar de Conversión UX en plataformas que necesitan entender por qué sus usuarios no avanzan… y qué hacer al respecto.
Solicita el tuyo aquí o escríbeme directamente.
No esperes a perder usuarios para darte cuenta lo que podrías haber ajustado a tiempo.